martes, 29 de octubre de 2013

Pan de muerto.

Buenos días, esta semana es la de los retos, y hoy le tocaba a Bake the World. Este mes nos traen un pan relacionado con el día de Todos los Santos y el día de los Muertos. Se prepara principalmente en la zona centro y sur de Mexico, ya que en este país existen unas tradiciones muy arraigadas en torno a la muerte. De hecho, quizás con el fin de acercar a los que se han ido, se considera que los muertos regresan en esas fechas para disfrutar de todo lo que les gustaba en vida y así les preparan importantes ágapes para celebrar estas fechas.

Como muy bien nos informan, el origen de este pan se remonta a la época precolombina, cuando los pueblos indígenas realizaban sacrificios para honrar o pedir a sus Dioses. Esos sacrificios eran habitualmente humanos, de forma que con la llegada de los españoles se trató de modificar esas costumbres y sustituirlo por pan que se cubría de un azucar teñida de rojo.
Vamos con la receta, que a mí me ha recordado a los suizos que me compraban mis abuelos.
  • Ingredientes:
500 g de harina de fuerza

10 g de levadura de panadería instantánea
2 cucharaditas de sal
130 g de azúcar
2 huevos grandes
120 g de leche
La ralladura de 1 naranja.
100 g de mantequilla

Para decorar:
1 huevo y azúcar.

Tamizamos la harina y mezclamos con todos los ingredientes, menos la mantequilla, la cual iremos incorporando poco a poco, cuando ya tengamos una masa "pringosa".
Mezclamos y amasamos, hasta que estén todos los ingredientes bien incorporados y tengamos una masa elástica y que no se nos pegue a las manos.
Hacemos una bola, y la dejamos leudar, tapada con un paño, en un bowl, hasta que doble su tamaño.
Después, desgasificamos y vamos haciendo bolitas del tamaño de nuestro puño. Si queréis podéis rellenarlas con chocolate, nueces...tal y como podéis ver aquí. (Yo rellené alguna con fideos de chocolate)
Reservamos parte de la masa para hacer los "huesitos" que colocaremos arriba y el "botón". Para los huesitos, hacemos un cilindro y lo marcamos con tres dedos, como véis en la foto.

Pintamos las bolas con huevo, y colocamos dos huesitos cruzados sobre cada una, y en el centro una bolita. Volvemos a pintar con huevo y espolvoreamos con azúcar.
Horneamos durante unos 20 min., a 180º.
Dejamos enfriar sobre una rejilla ¡¡¡y a comer!!!

lunes, 28 de octubre de 2013

Huevos a la "mouse". (Reto tía Alia)

Buenas noches, ya se que no son horas, pero hoy era el día de publicación del reto de Tía Alia, el primer día que participaba....pero me hice un lío con las fechas, y pensaba que era la semana que viene, por eso voy tan tarde...

Como todos los meses, había una propuesta salada y otra dulce, yo elegí la salada:


  • Ingredientes:
6 huevos
50 g de queso chedar
50 g de salmón ahumado
2 c.s. de bechamel
2 c.s. de nata líquida (para cocinar)

Primero, batimos muy bien los huevos y salamos; echamos el resto de ingredientes y mezclamos bien.
Engrasamos los moldes; como los mios son de silicona, solo los engrasé con un poco de aceite de girasol, pero si usáis otro tipo de molde, espolvorearlos con el pan rallado o harina, para que se desmolden bien.
Repartimos la mezcla en los moldes y ponemos al baño María, que les llegue el agua hasta la mitad, aproximadamente.Yo los puse en una cacerola y tapados; como mis moldes no son muy grandes en unos 8-10 min. estaban. Para comprobar si están hechos, podéis pincharlos con un palillo, y si sale limpio, los tenéis.
Dejamos templar un poco para desmoldar, y presentamos con salsa bechamel y tomate, en mi caso lo mezclé.


Aquí podéis ver la participación en el reto de otros compañeros blogueros. Qué disfrutéis!

miércoles, 23 de octubre de 2013

Tortilla de calabacín

Como ya sabéis, con los huevos pasa como con las patatas, que combinan con todo, así que hoy os traigo una tortilla, pero no os dejéis engañar por las apariencias, no es de patata, sino de calabacín; muy rica y jugosa.


  • Ingredientes 
1 calabacín mediano
1/2 cebolla
3 huevos (L)
Aceite de oliva

Picamos la cebolla y la pochamos con un poco de aceite a fuego medio. Mientras se hace, lavamos el calabacín, lo pelamos y cortaramos en rodajas finitas, como la patata para una tortilla. En este caso, a diferencia de cuando preparo la crema de calabacín, sí que los pelo, pero perfectamente podéis no hacerlo, es una manía mía.

Lo incoroporamos a la cebolla y los dejamos a fuego medio, hasta que esté blando. No es necesario añadir más aceite, ya que el calabacín soltará agua y tendremos suficiente líquido para cocinarlo.
Mientras vamos batiendo los huevos.
Escurrimos el calabaín y lo añadimos a los huevos; mezclamos bien.



En la misma sartén donde hemos hecho la verdura, echamos un poco de aceite  para cuajar la tortilla.
Este paso es exactamente igual que con una tortilla de patata, y ya dependerá de vuestro gusto, dejarla más tiempo o menos, según lo cuajada que os guste.
En casa la preferimos jugosa, así que con 1,5-2 minutos, por cada lado, suele ser suficiente. La volteamos con un plato llano del tamaño de la sartén o con una tapadera sin borde; ahora también podemos encontrar "vuelca tortillas", eso ya como mejor os apañéis.

Os aseguro que os sorprenderá lo buena que está.




lunes, 21 de octubre de 2013

Coulant o volcán de chocolate

Hoy traigo un postre muy sencillo y muy vistoso. Ideal para cuando tenemos visita, ya que lo podemos tener preparado con antelación al conservarse congelado; sólo necesitaremos hornearlo unos minutos. Se trata de una versión del coulant de chocolate, también conocido como volcán o bomba de chocolate.
La receta original, del chef francés Michel Bras, era más laboriosa, ya que llevaba dos capas, pero surgieron muchas versiones, y yo os traigo una de tantas.


Con las cantidades que os dejo, nos darán para 9 moldes de magdalenas, o si los preferís un poquito más grandes, para 4 flaneras.

  • Ingredientes:
125 g. de chocolate para postres
4 huevos
75 g de harina
75 g de mantequilla
75 g de azúcar
Cacao en polvo o harina



Lo primero que vamos a hacer es derretir el chocolate y la mantequilla, para que se nos vaya templando. Podemos hacerlo en el microondas o al baño María; si usáis el microondas, lo mejor es en la opción descongelar, durante un minuto aproximadamente, así es más difícil que se nos queme.

Por otro lado batimos bien los huevos junto con el azúcar; añadimos el chocolate y la mantequilla, una vez templados, y mezclamos bien, hasta que nos quede una mezcla homogénea.

Repetimos la operación con la harina.

Engrasamos nuestros moldes con un poquito de mantequilla o aceite de girasol, y los espolvoreamos con cacao en polvo, o si no tenéis, con harina, así evitaremos que se nos pegue el bizcocho y desmoldaremos mejor.
Rellenamos los moldes casi hasta arriba, dejando como medio centímetro o uno, hasta el borde.


Debemos dejarlos reposar al menos 2 horas en el congelador. Cuando vayamos a hornearlos, precalentamos el horno a 200º, los sacamos 5 minutos antes y horneamos durante 10-12 minutos. Dependerá de cada horno, os recomiendo que la primera vez hagáis pruebas con un coulant para comprobar el tiempo que necesitáis. Lo ideal es que se quede líquido el centro, pero si lo preferís más hecho, solo debéis dejarlo un poquito más (un minuto aproximadamente) o viceversa, si se quedó demasiado hecho.



¡Buen provecho!

martes, 8 de octubre de 2013

Crema de calabacín (muy muy ligera)

Tal y como adelanto en el título, la receta que traigo de crema de calabacín es muy ligera, ya que no utilizo nata ni crema evaporada para prepararla, en su lugar uso quesitos.
Es una receta que podemos realizar durante todo el año, ya que es muy versátil, y podemos tomarla tanto fría como caliente.

Ingredientes:

1 calabacín grande (600g)
1 cebolla
1/2 litro de caldo (o en su defecto agua y una pastilla de caldo concentrado)
1/2 vaso de leche
3 quesitos (light)
Aceite de oliva
Pimienta
Sal
Nuez moscada y/o albahaca (opcionales)

Lavamos muy bien los calabacines, ya que dejaremos la piel para que le de más color a nuestra crema y también para no perder lad  vitaminas que hay en ella.
Picamos pequeñita la cebolla y la pochamos en el aceite. Cuando esté transparente, añadiremos el calabacín en rodajas; rehogamos durante un par de minutos y cubrimos con el caldo y la leche.
 
No necesitamos mucha cantidad de líquido, ya que queremos que espese un poco y no vamos a usar nata; además el calabacín tiene bastante agua.

Dejamos cocer a fuego medio durante unos 15 min. Trituramos con la batidora, añadimos los quesitos y volvemos a triturar.

Probamos y rectificamos de sal. Es el momento de añadir,  si queremos, la nuez moscada, la pimienta y la albahaca, cantidades a vuestro gusto.

jueves, 3 de octubre de 2013

Costillas al horno con salsa de mostaza y miel.

Bueno, pues aquí os dejo la otra receta de hoy: Costillas al horno con salsa de mostaza y miel.

Seguro que muchos las habréis probado en alguno de los restaurantes americanos, ya que suele ser una de sus especialidades (con ésta y otras salsas)

  • Ingredientes:

250g de costillar de cerdo (por persona)
1 vaso de vino blanco
Aceite de oliva
Sal
Pimienta
Salsa de mostaza y miel

Para hacer esta receta, yo pido al carnicero el costillar entero, y las costillas ligeramente marcadas, para que luego nos sea mucho más fácil cortarlas.
Precalentamos el horno a 190º.
Colocamos el costillar entero en una fuente apta para horno, salpimentamos, echamos un poquito de aceite por encima y el vaso de vino. Cubrimos la fuente con papel de aluminio y horneamos durante 45 minutos.




Pasado este tiempo, sacamos y "pintamos" nuestras costillas con la salsa de mostaza y miel,  y volvemos a tapar con el papel de aluminio. Dejamos hornear durante otros 25-30 minutos.
 


Ya tenemos nuestro plato preparado. ¡Preparaos para chuparos los dedos!

Salsa de mostaza y miel.

Hoy traigo un par de entradas, esta primera muy cortita; se trata de una salsa que se prepara en pocos minutos, con ingredientes que habitualmente tenemos en casa. Nos servirá para acompañar distintos platos, tanto carnes como pescados, e incluso ensaladas.

  • Ingredientes:

2 cucharadas de mahonesa
1 y 1/2 cucharada de mostaza
1 cucharada de miel
1 cucharadita de vinagre (opcional)
Una pizca de sal
Una pizca de pimienta


Una vez que tenemos los ingredientes, sólo nos queda batir bien, mejor con varillas, para que ligue bien la mezcla.

El sabor podemos ajustarlo a nuestro gusto: si nos gusta más dulce corregimos con miel, y si es más amarga, con mostaza.
El sabor también dependerá del tipo de mostaza que usemos, la más utilizada para esta salsa es la tipo Dijon.

Probadla y me contáis.

Enseguida os dejo la otra receta, dónde podréis usar esta salsa.